Cuando se habla del entrenamiento de abdominales en corredores hacemos referencia a todo ese conjunto de ejercicios; los cuales buscan mejorar la fuerza y estabilidad del núcleo de nuestro cuerpo. Muchas veces denominado como “Core”, está ubicado en la zona media del cuerpo. Para los corredores mantener un perfecto control del núcleo corporal es esencial. Puesto que, del mismo parte toda la base para la ejecución de cualquier movimiento. Por ende, someterse a una rutina abdominal para el fortalecimiento de este es más que obligatorio. En las siguientes líneas te contamos todo lo que necesitas saber sobre este tema ¡No te lo pierdas!
¿Por qué es importante el entrenamiento de abdominales en corredores?
El núcleo engloba todo lo que es la región abdominal, el suelo pélvico, el diafragma, el multifidus y especialmente uno de los músculos más importantes para todo corredor que es el transverso. El transverso es un músculo que trabaja como una faja natural. El mismo, puede protegernos de cualquier clase de desequilibrio y debido a dicha propiedad es que el entrenarlo es la clave para cualquier rutina de ejercitación abdominal. El entrenamiento de abdominales en corredores evita que puedan ocurrir lesiones que interfieran con la actividad del maratón.
Beneficios de entrenar la región abdominal…
Estos son algunos de los beneficios que presentan los corredores al momento de someterse a una rutina de abdominales:
-Estabilidad:
Entrenar los músculos abdominales brinda una gran estabilidad y equilibrio. Cualidades fundamentales al momento de correr y poder desplazarse de forma segura. Puesto que, brinda un apoyo extra y estabilidad en la columna vertebral. Por lo que, hay una compensación en el núcleo del cuerpo. Manteniendo una postura recta en relación con la columna vertebral, permite a la persona adoptar un sprint de carrera más erguido por lo que brinda una mayor técnica al ejercer la actividad. Sin embargo, para un mayor balance es bueno también fortalecer músculos complementarios como lo son los de los muslos y las pantorrillas.
-Disminuye la fatiga:
Al evitar el trabajo extra de otros grupos musculares para brindarle estabilidad al cuerpo, hay un considerable ahorro energético. Por lo que, la persona se sentirá menos cansada y toda su energía estará dirigida a la labor principal que sin lugar a duda es correr. Aumentando el tiempo de esfuerzo hasta que finalmente el corredor alcance su límite.
-Evita lesiones:
Mantener una buena estabilidad, gracias a los ejercicios abdominales destinado a los corredores. Previene que, las estructuras de soporte del cuerpo como lo son las rodillas y las pantorrillas reciban un impacto bastante negativo. Cuando se mantienen en movimiento por largas distancias, puede existir una sobrecarga sobre la espalda baja o lumbar. El mantener una definición perfecta del centro de gravedad o núcleo del cuerpo, permite una homogénea distribución del esfuerzo en cada grupo muscular implicado en la carrera. Por lo que, las lesiones localizadas no serán un problema y el entrenamiento de abdominales en corredores se hace una actividad obligatoria.
-Incrementa el rendimiento:
Este apartado compone la suma de los tres aspectos anteriores. Puesto que, al haber más estabilidad, una menor probabilidad de lesionarse y mantener más tiempo el esfuerzo a tope sin cansarse. El corredor termina manteniendo un mejor desempeño ya sea en competencias o entrenamientos. Por lo tanto, la rutina de ejercitación abdominal es la base de su formación como atleta.
-Mejoramiento de la estética:
Como respuesta al estímulo de la ejercitación abdominal, la cintura de los corredores es mucho más estrecha con un relieve y definición abdominal bastante notoria. Si bien, lo importante es la función que cumple mantener un abdomen altamente ejercitado. Es importante destacar que, el aspecto físico se ve recompensado.
¿Cómo realizar el entrenamiento de abdominales en corredores?
La mejor manera de entrenar el centro de gravedad es, a través de ejercicios funcionales que emulen el movimiento al correr. Lo importante es añadirles un mayor grado de complejidad. Tomando en consideración estos principios, los cuales son los que permiten desarrollar un buen núcleo. Así como, un desarrollo más prominente de los músculos abdominales. Hay que considerar que, al correr siempre apoyamos una pierna contra el suelo. Por lo que, una buena rutina de ejercicios que use esa modalidad de ejecución del movimiento es un buen plan para predisponer el cuerpo a la presión de la carrera.
Las rutinas de core, en general, son bastante usadas para el entrenamiento de abdominales. También, la realización de sentadillas es un ejercicio que no sólo va a trabajar las piernas. A su vez, desarrolla la zona abdominal y lumbar del corredor.
Errores más comunes y sus posibles soluciones…
Cuando del entrenamiento de abdominales en corredores se trata, muchos son los errores que se cometen. Sobre todo, al plantearse una buena rutina de ejercitación abdominal. En primera instancia y en la mayoría de los casos, se desconoce por completo los músculos implicados. Por ello, hay que evaluar las zonas donde hay una mayor carga al correr, cosa que es bastante fácil de encontrar al notar que ciertos lugares quedan más maltratados después de un entrenamiento intenso. Por lo que, esto sólo es indicio de que ciertas zonas localizadas merecen una mejor ejercitación o al menos una mayor implicación al momento de llevar a cabo los ejercicios abdominales. Otro error frecuente, es confiar únicamente en el ejercicio para definir.
La mejor solución al respecto es una rutina de ejercicios correcta. La cual, trabaje cada uno de los músculos abdominales y que incluya la lumbar. También, se requiere una buena dieta que ayude a quemar la grasa. Si bien el correr cuenta como un ejercicio aeróbico de gran intensidad. El no mantener un buen control de las comidas conlleva a que el cuerpo acumule mucho tejido adiposo. Puesto que, esta condición hace perder estabilidad a la hora de correr. Por lo tanto, muchas veces no es suficiente los ejercicios abdominales para obtener buenos resultados. Es necesario, entonces, tomar medidas alternativas que complementen y optimicen el entrenamiento.
