¿En qué consiste el entrenamiento aeróbico y anaeróbico?

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entrenamiento aeróbico

Cuando se habla de entrenamiento aeróbico y anaeróbico, se refiere a ejercicios en donde el organismo obtiene su energía con o sin presencia de oxígeno. Cuando realiza una actividad física con necesidad de oxigeno realizamos un entrenamiento aeróbico, en caso contrario, el entrenamiento es anaeróbico. Normalmente intervienen los dos, pero siempre predomina uno de ellos, es por ello, que mencionamos que un ejercicio es predominantemente aeróbico o anaeróbico. Para elegir un tipo de entrenamiento, debes determinar los objetivos que desees alcanzar. Pero tratándose de salud, se debe alternar ambos tipos de ejercicios para conseguir beneficios cardiovasculares y musculares en simultáneo. 

Entrenamiento aeróbico

Con el entrenamiento aeróbico trabajamos la resistencia y nuestra capacidad pulmonar, pero los dos tipos de entrenamiento sirven para mejorar el sistema circulatorio. Del entrenamiento aeróbico podemos decir lo siguiente:

  1. Es comúnmente conocido como cardio, se trata de un ejercicio que requiere la respiración aeróbica para poder realizarlo.
  2. En él se incluye cualquier tipo de ejercicio  practicado a nivel moderado y con periodos de duración extensos. Esto ayuda a mantener una excelente frecuencia cardiaca y más elevada.
  3. El oxígeno en este tipo de entrenamiento se usa para quemar grasas y azúcar y en la generación de energía de los músculos.
  4. El ejercicio aeróbico más común es la caminata y el running, al hacerlo el cuerpo adquiere más resistencia y ayuda a combatir la obesidad.

Los beneficios del entrenamiento aeróbico son los siguientes:

  1. Reducción de grasa subcutánea, esta se localiza entre los músculos y la utiliza como fuente principal de energía.
  2. Reducción en el mediano plazo de la presión sanguínea y la reducción del nivel de colesterol total en la sangre.
  3. Mejora la capacidad pulmonar, circulación sanguínea y el aprovechamiento del oxígeno.
  4. Reafirma los tejidos, la piel recupera la lozanía.
  5. Reduce la mortalidad cardiovascular.
  6. Se incrementa la reabsorción de calcio en los huesos, se fortalecen y disminuye el riesgo de fracturas.
  7. Disminuye los niveles de adrenalina, que son los causantes del estrés y se incrementan las endorfinas y otras sustancias cerebrales que reducen tensión emocional.

Entrenamiento anaeróbico

En el entrenamiento anaeróbico no requiere que está implícita la respiración para poder realizarla, aunque se requiere una respiración rápida. Es un ejercicio de corta duración pero de alta intensidad, por ello. El metabolismo se desarrolla exclusivamente en los músculos y sus reservas de energía, sin utilizar el oxígeno de la respiración. Dentro del entrenamiento anaeróbico podemos encontrar:

  1. Levantamiento de pesas.
  2. Abdominales.
  3. Cualquier ejercicio que implique un esfuerzo breve.

El entrenamiento anaeróbico es muy utilizado por atletas con poca resistencia que desean adquirir potencia, y por culturistas que buscan ganar masa muscular. Cuando los músculos se entrenan con ejercicio anaeróbico, adquieren mayor rendimiento en actividades de corta duración, pero de gran intensidad.

Según mochos expertos, es más recomendable y saludable para el organismo recurrir a los ejercicios aeróbicos. Es un entrenamiento progresivo que no impacta excesivamente en el cuerpo. Resulta perfecto para mejorar tu condición física y la salud cardiovascular. Además te permite bajar de peso, tonificar músculos, pero, de un modo progresivo. Ahora los ejercicios anaeróbicos son ideales para fortalecer el cuerpo y mejorar el tono muscular. Generan mayor impacto en el cuerpo, pero son perfectos para tonificar y definir. Por eso siempre tu modo de entrenamiento deberá ir definido en función de los objetivos que tú deseas alcanzar en un determinado momento:

  1. Si deseas bajar de peso y mejorar tu salud, entonces te debes decantar por los ejercicios aeróbicos.
  2. Si deseas tonificar y definir, debes fijar tu atención en los entrenamientos anaeróbicos, los cuales pondrán a trabajar tu cuerpo, siempre al máximo.