El confinamiento por coronavirus ha logrado afectar los ingresos que se generaban en todos los deportes, debido a la falta de asistencia y organización. El running no es la excepción, desde la aparición del virus hemos visto cómo se suspenden eventos que habían sido tradicionales durante años. Esto ha logrado una disminución considerable en los ingresos en el running, generando complicaciones entre sus organizadores. El hecho de que atletas se hayan contagiado de la enfermedad, la suspensión de competencias o la realización a puerta cerrada de algunas ha perjudicado. Los resultados se ven en una disminución considerable de los ingresos en el running.
¿Cómo se han visto afectados los ingresos en el running por el coronavirus?
Desde la aparición del Covid-19 se observa un impacto significativo en los deportistas de todos los niveles que abarca su salud mental y su economía. Según encuestas el 71% de los atletas se muestran preocupados por recibir una compensación económica mientras dure la restricción causada por el virus. Motivado a esto se han visto cambios en el comportamiento, la actitud y en los horarios de entrenamiento. Esto genera un importante costo en la salud mental del corredor. Debido al estrés se ha disminuido la capacidad inmunológica del cuerpo y se ha afectado la capacidad de recuperación total del ejercicio intenso.
Aunque todo esto puede implicar un efecto negativo en los ingresos en el running por el coronavirus, se ha visto un interés adicional de los corredores. Los atletas están invirtiendo más en sus prácticas deportivas. Pero los encargados de mantener activo el deporte ven mermados sus ingresos debidos al cierre de gimnasios, suspensión de competencias. En la actualidad muchos cetros aún permanecen cerrados, cosa que hace ver más lejos la posibilidad de cobrar las cuotas a sus abonados. Los maratones y otras pruebas han visto como muchos de ellos han sido cancelados y otros no contaran con la mayoría de sus corredores.
El gasto deportivo está condicionado a la asistencia y a la participación, están aportan en conjunto los ingresos. Con la suspensión de eventos y la imposibilidad de competir en público se genera una disminución de los ingresos en el running por el coronavirus. Los países han visto a raíz de verse impactados por los efectos del coronavirus una recesión palpable en sus ingresos deportivos. Esto ha afectado drásticamente la manera habitual de hacer deporte. Esto es una demostración más de cómo ha afectado los ingresos en el running por el coronavirus, y el gran impacto en los deportistas.
¿Qué hacer para evitar el impacto?
Aunque continuamos siendo afectados por los estragos causados por el coronavirus en todos los ámbitos, se debe buscar un consenso que permita iniciar una recuperación. El deporte por su parte debe también iniciar acciones que le permitan comenzar a levantar los ingresos económicos que se perdieron a raíz del confinamiento. En varias de las especialidades deportivas se estudia la posibilidad de reducir salarios para evitar una bancarrota que complique más la situación que ya existe. Las finanzas de los atletas, los fanáticos, los inversionistas y todos los que intervienen en estos eventos están seriamente afectadas a causa de la pandemia. Aunque en lo particular muchas personas han vuelto a hacer uso de las calles para volver a correr, siguiendo las medidas de bioseguridad, por supuesto. Pero los grandes eventos siguen paralizados o se realizan a puerta cerrada, haciendo que sigua disminuyendo sin remedio los ingresos en el running por coronavirus. Por eso urge que se adopten las medidas necesarias para reactivar de la manera más segura las prácticas deportivas como el running para nuestro beneficio. Así podremos ver mejorados tanto el estilo de práctica deportiva y a su vez comenzara la recuperación de los ingresos en el running por coronavirus.
