Si eres una de las muchas personas que normalmente corre en trotadora, te entregamos algunos consejos.
Son prácticas, ajustables y pueden, en ocasiones, suplir el trote al aire libre o complementarlo en casos de rehabilitación. Sin embargo, revisten cierto peligro que debe ser considerado y, de acuerdo a algunas precauciones básicas, minimizado.
Al menos tres personas mueren cada año por accidentes en trotadoras en Estados Unidos, según cifras de la Comisión de Seguridad de Productos para el Consumidor de ese país. Y no es infrecuente el retiro para reparación o cambio de muchas unidades de diferentes marcas producto de aceleraciones repentinas y mal funcionamiento. En país del norte se producen unas 19 mil consultas al año por accidentes en trotadoras.
Golpes en la cabeza, lesiones de tobillo, de rodilla, dedos heridos y otros accidentes son posibles y aunque no existen estadísticas relativas en Chile, no está de más tomar algunas precauciones.
Reduce las distracciones: Ata tus cordones, llena tu botella y pon tu música. Luego enfócate. La TV, el celular, la trotadora del vecino o las personas alrededor pueden sacarte de concentración lo justo como para producir un mal momento.
Úsala bien: Lo correcto es subir a la trotadora en la velocidad mínima, caminando, con las manos cerca de las barras de apoyo, recorriendo con las plantas de los pies la banda sin fin. Luego, poco a poco, ir incrementando el paso. Los cambios súbitos de velocidad pueden terminar con un corredor volando o aterrizando de bruces sobre la banda.
Usa el freno de seguridad: Las trotadoras vienen equipadas con una freno de seguridad que las pausa en caso de ser activado. Son resultado de la confirmación de que los accidentes en trotadora, por muy cómicos que parezcan, son serios.
¡Espacio, por favor!: No querrás resbalar e ir a dar contra el muro detrás de la trotadora. Pero sucede. Por ello es recomendable al menos un metro y medio detrás de la trotadora. Los pisos de concreto o similar también lesionan cuando se sale inesperadamente de la trotadora. Conviene poner colchonetas en torno a ésta.
Corre con control: La trotadora es excelente y se pueden conseguir resultados en ejercicios de velocidad. Sin embargo, son los más peligrosos cuando el sprint del humano sobrepasa el funcionamiento de la máquina. Guíate por los niveles y respétalos.
¿Niños? Mejor no: No es por ser aguafiestas pero las trotadoras son peligrosas para los niños. Sin la supervisión atenta de un adulto el riesgo se incrementa aún más. Cabellos enredados en la cinta o manitos heridas, o peor, como en el caso de la pequeña hija de cuatro años del ex boxeador Mike Tyson, que sufrió un fatal accidente jugando en una trotadora, atestiguan que las precauciones son pertinentes y es un tema serio.