La amortiguación en las zapatillas de running es la característica más importante que tiene en cuenta un corredor al comprarlas. Dicha amortiguación se encuentra principalmente en la media suela. Esta característica siempre se encuentra en uh punto muy alto de las exigencias de los corredores y los modelos de zapatillas que las poseen incrementan. La amortiguación en las zapatillas de running recibe, absorbe y mitiga la fuerza del impacto que se da en la zancada. Se recomienda el uso de zapatillas con extra de amortiguación en función del peso del corredor, catalogando inclusive las zapatillas en función de su amortiguación.
¿Cómo debe ser la amortiguación en las zapatillas de running?
Al comprar zapatillas de running consideramos como punto importante la amortiguación que brindan, pero tenemos que establecer cuál es la mínima o máxima amortiguación aceptable. La amortiguación en las zapatillas de running es la característica que le permite a un tejido absorber la fuerza de la zancada al ir corriendo. Las fuerzas verticales en el pie se multiplican hasta 2,5 veces el peso del cuerpo durante una carrera. Esto significa que si un corredor pesa unos 50 kg soporta alrededor de 125 kg en cada paso. Si suponemos un entrenamiento de 10 km a unos 8000 pasos, se tendría que los pies del corredor soportarían aproximadamente 1 tonelada de peso.
Para contrarrestar este efecto cada marca deportiva tiene su propio sistema de amortiguación que los diferencia. Pero se debe considerar que a medida que disminuye la capacidad para amortiguar en la zapatilla se debe aprender a modificar su mecanismo de apoyo. Además hay que modificar la técnica de carrera para mantener constantes las cargas externas y poderlas controlar. Basados en el desgaste de las zapatillas no se debería considerar la amortiguación en las zapatillas de running como un indicativo para elegirlas. Aunque se pueden recomendar la utilidad de las zapatillas muy amortiguadas en principiantes o corredores con técnica de carrera deficiente.
Para saber qué tipo de amortiguación en las zapatillas de running se requiere hay que considerar factores como la superficie durante la fase de impacto. Es importante saber dónde se corre, sea arena, nieve, tierra o asfalto, la irregularidad del terreno determina la fuerza de impacto. También hay que considerar la zancada, algunos corredores impactan el suelo con el talón, mientras otros lo hacen con la parte delantera del pie. Otro aspecto es la estructura corporal, la piel y el tejido graso en el interior del pie son muy importantes. La amortiguación en las zapatillas de running dependerá entonces de estos u algunos otros factores.
¿Cuánto es el tiempo de vida útil de la amortiguación?
A pesar de todas las propiedades de amortiguación que brinda la media suela tenemos que considerar cuanto puede durar tal propiedad. Esto es importante para saber en qué momento se ha perdido la amortiguación en las zapatillas de running. Por eso es muy importante reconocer por donde comienza a deteriorarse la media suela de las zapatillas. Este daño no ocurre de manera visible, ocurre silenciosamente y por compactación de su material, de este modo pierde sus propiedades. De este modo pierde respuesta, o su capacidad para recuperar su forma una vez que impactó en el suelo y se dio una nueva zancada.
Por eso se estima que la amortiguación en las zapatillas de running dé el máximo de capacidad en los primeros 600 o 1000 kilómetros de uso. Cuando las zapatillas acumulen ya unos 10000 kilómetros estarán compactadas de tal manera que no podrían proporcionar la amortiguación que mostraban cuando eran nuevas. En este momento aunque la frecuencia de las zancadas sea muy lenta, la zapatilla no podría brindar la amortiguación como fue inicialmente diseñada para hacerlo. Así ya podremos dar por finalizado el tiempo de vida de las zapatillas y se tendrá que iniciar la elección de unas nuevas con amortiguación.