Sabemos que el correr proporciona beneficios a nuestro organismo, pero si no tenemos el cuidado necesario podemos afectar nuestros huesos. Cunado practicamos running, nuestros y cartílagos sufren los impactos de las zancadas durante una carrera llegando inclusive a lesionarnos. Por eso es necesario prestarle especial atención al cuidado de nuestros cartílagos si queremos continuar disfrutando del running. Practicar running lejos de perjudicar nuestros huesos los hace más fuertes y los recalcifica para un mejor desempeño del corredor. Esto resulta beneficioso sobre todo para corredores de avanzada edad quienes son más propensos a sufrir lesiones de este tipo.
El ejercicio permite mantener la densidad ósea en niveles óptimos, lo que nos ayuda a prevenir enfermedades como la osteoporosis. Los ejercicios que aportan beneficios al cuidado y fortalecimiento de los huesos son los que implican presión, torsión y movimiento. Estos ejercicios no tienen que ser de alta intensidad, solo que haya una variación rápida de movimientos sobre los huesos. Esta elevada variación de movimientos y cambios de dirección hace que la tensión de los músculos actúe sobre los huesos. Los ejercicios de este tipo que podemos hacer son caminar, trotar, correr, etc; por eso el running aplica perfectamente aquí.
Consejos para cuidar los huesos
El running es una práctica fundamental en el cuidado de nuestros huesos, ya que estimula el crecimiento óseo del corredor. Cuando corremos los músculos tiran de los huesos y los masajean, este masaje logra estimular el crecimiento de los huesos. Si se combina el running con entrenamientos de fuerza cuidaremos aún más nuestros huesos y reduciremos el riesgo de osteoporosis. Los corredores que realizan entrenamientos y competencias intensas tienen un alto riesgo de padecer fracturas por estrés o por sobreentrenamiento. Para mantener la salud de nuestros huesos es necesario mantener una dieta rica en calcio además de otros factores presentes.
Pero además del calcio existen otros nutrientes que nuestros huesos necesitan para fortalecerse y mantenerse saludables para practicar el running. Además, debemos mantenernos en un peso adecuado, practicar deportes como el running, moderar el consumo de alcohol, cafeína y sal. También debemos evitar fumar y adquirir malos hábitos que no solo perjudiquen nuestros huesos sino también nuestro rendimiento en competencia. Los nutrientes que debemos suministrar a nuestro cuerpo para el cuidado de los huesos son el magnesio, fosforo, vitamina D. Además de estos también se requiere vitamina K, potasio, cromo, silicio y zinc; con esto contribuirás con la salud ósea.
¿Cómo saber que tenemos problemas?
Existen varios síntomas que te informan que estas presentando problemas con tus huesos y muchas veces los dejamos pasar desapercibidos. Uno de estos síntomas se manifiesta al ver que tus uñas se rompen con facilidad por la falta de colágeno. Esta falta de colágeno te dice que además de tus uñas también tus huesos están debilitados haciendo que presentes lesiones. Otro síntoma son inexplicable dolores de encías, esto también te avisa que tienes problemas con la fortaleza de tus huesos. También los problemas con las articulaciones te dan una alarma muy clara acerca de posibles problemas con tu salud ósea
Todos estos síntomas los podemos atacar asistiendo oportunamente a nuestro medico de confianza para atacar efectivamente las afecciones que presentamos. Pero también es necesario establecer rutinas de entrenamiento que te permitan alternar el tratamiento médico con la práctica del running. Además de esto también es bueno respetar la dieta que ayuda a recuperar los niveles de nutrientes para poder recuperarnos. Con todos estos aspectos plenamente controlados es totalmente seguro que podremos practicar running de manera eficiente saludables. Con esto queda demostrado que cualquier edad es buena para practicar el running siempre que sepamos cuidar eficazmente nuestra salud.