Mi experiencia en los 21k Maratón de Santiago 2018

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El domingo 8 de abril, se corre la cita más icónica de nuestro país, hablo de la Entel Maratón de Santiago, competencia que reúne mas de 30.000 corredores a lo largo de todo el país e invitados del extranjero.

Para comenzar, comentar características generales del evento:

Además, este año, se recogieron ideas de distintos maratones del mundo y se trataron de implementar:

  • Crearon un manual de corredor, el cual podía ser descargado de la página (http://maratondesantiago.com/manual/), muy bueno a la hora de informarse.
  • Les dieron cabida a iniciativas sociales, Intervenciones artísticas, legados culturales, apoyo a causas solidarias, conciencia verde, entre otros.
  • Crearon la largada por oleadas en 21K (las llamadas waves), partían desde las 8:30, 8:45 y 9:00, además haciendo eco a que era primera vez que se realizaba, si querías cambiarte de ola, podías presentar un certificado de otra carrera en donde se acreditara que habías corrido en menos de 1:40:00 una media maratón. Punto para la organización, el desafío es implementar las olas en los 42k.
  • Crearon una aplicación, muy buena por lo demás, en donde podías ir haciendo seguimiento en línea a las personas que te interesaban, esto, creo sirve mucho más para acercar la carrera a la familia, ya que todos podíamos tener familiares siguiendo nuestro recorrido.

Dicho todo lo anterior, paso a detallar el día de la carrera:

Domingo 8 de abril, mínima de temperatura de 8 grados, con sensación de 6, llegando a una máxima de 27 grados, teniendo una media histórica de 7°/24° (https://www.accuweather.com/es/cl/santiago/60449/april-weather/60449), temperatura a considerar si quieres correr el próximo año.

Muchos corredores en las calles, por primera vez se permitió que varios clubes pudieran colocar sus carpas cerca de la partida, específicamente en el sector de Bulnes, esto hacía que pudieran reunirse y calentar sin problemas.

Desde que leí la implementación de las olas de largada tenia mis dudas acerca de como iba a resultar, pero para mi sorpresa el encajonamiento estuvo muy bien y ordenado; cabe destacar que siempre existirán personas que se saltan las barreras y no respetan el orden de largada, pero esperemos que año tras año sean menos.

Ambiente espectacular al comenzar, se da la partida a las 8:30 y comienza el desafío.

En si los 21K de la eMDS son bien pensados e incluso puedes meter una buena marca, comienzas bajando, luego vienen varios falsos planos, para desde el kilómetro 4 – 5 comenzar a subir hasta el 15-16 y el resto es bajada. Quizás suena fácil leerlo, pero recorrerlos es un tanto difícil.

Comienzas bajando por la Alameda, hasta España, acá la primera dificultad en donde aparecen los adoquines, que pueden desestabilizar a cualquier, ojo con eso.

Luego rodeas el parque O’Higgins llegando hasta Rondizzoni, (todos los años atrás en ese lugar existía una banda, este año extrañé no verla ahí, quizá iba muy concentrado y no me di cuenta), acá está el primer punto de hidratación, kilómetro 5.

Termina Rondizzoni y comienzas a subir por Viel (ruta 5) y llegas hasta Matta, acá transcurre desde el kilómetro 6 hasta el 9, luego tomas la continuación que es Grecia, esto transcurre todo muy rápido, ya que lo sientes como una línea recta, no te das cuenta y ya estas en el segundo punto de hidratación a la altura del kilómetro 10, al llegar al 11, te topas con campo de deporte y comienzas a subir, psicológicamente este ascenso cuesta demasiado, si no lo trabajas bien, tu carrera puede verse afectada, ya que el trayecto desde ahí, pasas por Antonio Varas, doblas por Pocuro y ya eso se te hace interminable, adicional a eso ya se presenta el tercer punto de hidratación, por último y como de regalo te ponen el giro a la izquierda por Roberto del Rio y lo único que esperas es que llegue rápido el retorno por Eliodoro Yáñez.

Llega el ansiado retorno, a la altura del kilómetro 15 – 16 y el resto es historia, si bien son 5 kilómetros, la pendiente hace que pasen muy rápido, en el kilometro 18 viene el último punto de hidratación y ya sientes que estas cerca.

Sigues bajando, llegas a Baquedano y el resto es solo esperar, ya estás ahí y estas terminando, este trayecto lo puedes usar para apurar mas el ritmo si te dan las piernas. Personas por ambos lados alentándote hacen que puedas enfocarte en otra cosa que no sea tu físico y puedas soltarte. Ya estas a 1 kilometro de la meta, sientes la música y el resto es historia, ese trayecto a la meta en donde sientes que nada te puede salir mal, terminan los 21 kilómetros y el resto es disfrutar.

Para graficar todo los que escribí, les adjunto el video de mi recorrido.

En mi caso, estoy volviendo a entrenar fuerte y pude terminar sin problemas en 1:22 y monedas, los 21K sirven para programar lo que puede ser una maratón para el segundo semestre y en base a este resultado tirar líneas para establecer hacia que marca queremos apuntar, pudiendo ser Viña, Buenos Aires, Costa Pacifico, etc.

Espero que todo hayan cumplido sus objetivos, en esta eMDS, nos vemos en otra entrega.